El Council on Foreign Relations fue creado en 1919 por las delegaciones de la Conferencia de Paz de París, con sede en Nueva York y una organización hermana, el Royal Institute of International Affairs, en Londres. El Instituto de Relaciones del Pacífico se creó exclusivamente para los asuntos de Extremo Oriente.
El Consejo de Relaciones Exteriores fue investigado recientemente por el Subcomité de Seguridad Interna del Senado, que descubrió que era una organización de fachada comunista dedicada a la revolución mundial marxista. Se demostró que el Instituto era el principal factor en la creación de la nueva sociedad en América, una sociedad planeada por Marx y Lenin, donde la religión y las instituciones políticas no tenían cabida.
El Consejo de Relaciones Exteriores, fundado por internacionalistas e intereses bancarios, ha desempeñado un papel importante en la configuración de la política exterior estadounidense desde su creación en 1920. Sus miembros están dominados por internacionalistas, y han mantenido un férreo control sobre las actividades y objetivos del grupo. El Consejo ha logrado imponer un decreto de silencio a los miembros de la Comisión Americana para Negociar la Paz en 1918 y se ha comprometido en proyectos de propaganda de largo alcance para promover su versión de los acontecimientos políticos. Con sus fondos ilimitados y sus influyentes miembros, el Consejo de Relaciones Exteriores sigue siendo un actor clave en la escena política mundial.