Del mismo modo, por lo que respecta a las sociedades secretas, me basaré en la medida de lo posible en los documentos y confesiones de sus miembros, punto sobre el que he podido reunir numerosos datos nuevos que corroboran plenamente mi tesis anterior.
Debe entenderse que no me propongo hacer una historia completa de las sociedades secretas, sino sólo de las sociedades secretas en sus relaciones con el movimiento revolucionario. No intentaré, por tanto, describir las teorías del ocultismo ni investigar los secretos de la masonería, sino simplemente relatar la historia de estos sistemas para mostrar cómo han sido utilizados con fines subversivos.
Si no logro convencer a los incrédulos de la existencia de fuerzas secretas de la revolución, no será por falta de pruebas.